jueves, 19 de noviembre de 2009

"¡La tenés Inside!"

Es lo que repiten los jugadores limeños incesantemente tras eliminar, justamente, a Inside, el primer rival del Torneo de Buena Conducta. ¿El motivo de tanta euforia? Con el 3 a 1 del último sábado La Lima hilvanó la tercera victoria consecutiva, algo que no había pasado jamás en los últimos 5 años. Y va por más.






Dibu y Seba, de muy buen ánimo









Ya se respiraba en el aire durante la previa. El humo del tabaco de Mauri y Diego (de eso hablamos) representaba ni más ni menos que la fragancia de la tranquilidad y la seguridad de un plantel que hoy por hoy se encuentra atravesando la mejor racha del último lustro. Es que el pase a 16º de final del Torneo de Buena Conducta coronó una serie impresionante de dos victorias al hilo y abrió la posibilidad de quedar en la historia, de cara al compromiso frente al accesible Inside.







Javier G. se asegura de que vengan todos



Muy cierto es que La Lima viene logrando desde hace tiempo jugar el famoso "partido 13" de alguno de los dos torneos anuales, ya sea por clasificar al Torneo Posta o por lograr meterse en el reducido de Buena Conducta, un minicertamen que año a año capta mayor interés, sobre todo en aquellos equipos algo modestos. Pero también hay que señalar que, casi como una maldición, al verde le ha tocado la mayor parte de las veces quedarse afuera en la primera instancia eliminatoria, muchas veces con equipos pedorros o mediante la lotería de los penales.



La conjunción de ambas costumbres, la de no abrochar tres triunfos consecutivos y la de quedarse afuera en la primera cambio, podrían haber significado una mayor presión para este equipo que, no obstante, tiene hoy en su fortaleza anímica su arma más eficaz.





Una nueva convocatoria exitosa (otra vez doce) reflejaba que el sorpresivo cimbronazo que significaron los casi seis meses sin victorias había quedado definitivamente atrás. La Lima dispuso para el comienzo del encuentro una formación con Diego en el arco, Javier G., Mauri, Dibu y Javier S. en la zaga, un mediocampo con Víctor, el Vaca, Rodrigo y el Primo, y una delantera formada por el Gufy y el Poten. Seba quedó en el banco de suplentes por un rato.







Sin abundar en detalles (el cronista se vio obligado a retirarse por un rato), se puede decir que, sin ser superior, Inside logró ponerse en ventaja a poco de comenzado el partido, tras una desinteligencia de la defensa limeña luego de un saque lateral. La Lima se lanzó enseguida a la búsqueda del gol que empardara y cerca estuvo, en los pies del Poten y en la cabeza del Vaca, de lograrlo.





El rival daba ventajas pero se encontraba con el marcador a favor y cuidaba la victoria. Hasta que a poco del final del primer tiempo, el Gufy recibió un taco del Poten (el exceso de habilidad le significó al barbado un desgarro en el muslo derecho, que lo sacó de la cancha hasta el año que viene), enganchó y sacó un zurdazo al primer palo, para clavar el 1 a 1.

Así quedó la pierna del Poten

El primer tiempo terminó empatado, La Lima metió el cambio forzado (Seba por Poten) y reacomodó las líneas para salir a ganarlo.


El complemento mostró un verdolaga superior a su rival, y tempranamente se iba a dar vuelta el resultado. Tras una confusa jugada en el área, el Vaca atropelló y puso el segundo gol limeño.


Con el resultado a favor, La Lima se limitó a administrar los tiempos del partido, y pudo aumentar, con un pelotazo a quemarropa de Mauri, que el arquero sacó muy bien. Sobre la hora, Inside casi lo empata cuando el arquero subió a cabecear una pelota parada, entró solo por el segundo palo y por muy poco no conectó.


Ya en tiempo de descuento, el juez sancionó un tiro libre en el vértice del área, favorable a La Lima. Rodrigo, resentido en su lesión de rodilla, se hizo cargo de la ejecución. El disparo, bajo, rozó la barrera y se desvió hacia el segundo palo, cuando el arquero ya se había movido y nada podía hacer para evitar el tercer gol.



La pelota ya está "Inside": es el tercero


El juez cerró el partido y el verde volvió a festejar, por tercer sábado consecutivo. Tres partidos ganados, 10 goles a favor y la deuda pendiente: volver a cerrar el arco propio, algo que no logra desde hace 8 meses (26 partidos). Por lo pronto, ya repitió una marca que no lograba, por lo menos desde el 2004 (las estadísticas consultadas cuentan desde el 2005 hasta la fecha, y nunca hubo tres partidos ganados seguidos en más de 120 encuentros)


La próxima cita será por octavos de final frente a Merengues. Habrá que ver quién está "más dulce"

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿De verdad esa es la pierna del cronista?

Javier S.