"Renuncio a los honores, pero no a la lucha"

La conocida frase de Eva Duarte (quien pasara a la inmortalidad hace hoy 55 años) fue utilizada en esta tarde por una pieza vital en el andamiaje limeño, para graficar una situación que importa y mucho a la familia verdolaga. Quien la pronunció fue nada más ni nada menos que BenQ C740, la máquina fotográfica que tuviera destacada labor en el primer semestre del año como instrumento de registro de las actividades de La Lima, para anunciar su retiro de la actividad por espacio de algunas semanas, luego de que se le detectaran fallas que merecen atención urgente.

Según ella misma nos dijo, "esto ya me había pasado en un par de ocasiones, pero ahora parece que va en serio". La protagonista de tantas imágenes utilizadas para la burla y la chanza en el blog limeño, habría comenzado a sufrir serios problemas el pasado viernes, y desde entonces no ha mejorado. "Las fotos me salen con poca luz, muy solarizadas y saturadas en tonos violetas y rojizos; los técnicos me dijeron que puede ser un problema en el sensor, ubicado en la placa lógica y yo no sé que pensar", manifestó preocupada BenQ, quien cree estar pagando las consecuencias de no ser una Kodak, una Sony o una Canon.

"Soy muy joven, y todavía estoy en garantía, por suerte para el Poten (el dueño); pero bueno, tengo que parar la pelota por un tiempo, hasta que se sepa a ciencia cierta que me está pasando", dijo y agregó que "estaba cantado que mientras me siguiera usando el Poten, iba derechito a la oscuridad total". Según nos contó el Poten, lo que BenQ no sabe es que su pronóstico es incierto: en caso de que la garantía no cubra la reparación, su costo puede ascender a 200 dólares, cifra por la que casi podría ser cambiada por otra máquina nueva. Obviamente, esta hipótesis aún se baraja en la mayor de las reservas, para preservar el ánimo de C740.

La cámara quiso aprovechar la oportunidad para comunicarle al plantel limeño que "no deben extrañarme, vean el lado positivo: ya sé que no se van a poder hacer los cheroncas delante mío para después verse como bananas en el blog, pero piensen que de los papelones que hagan de acá a un mes no habrá imagen que los eternice". Tranquila, la máquina agregó que "a mí también me va a venir bien parar, hasta que se sepa si todo lo que me tocó registrar en estos meses fue o no nocivo para mi funcionamiento".

Según la información, el parate puede llegar a durar cuatro semanas, aunque no se descarta que reaparezca antes de tiempo, si el servicio técnico le da el alta.

¡Suerte, compañera!