jueves, 17 de abril de 2008

El destacado de los rivales







por El Colo


Hoy: El petiso barbudo






Era una mezcla de gnomo disfrazado de humano, músico setentero devoto del ácido y lumpen de peña. Jugaba de 7 (creemos que su número era el 10) y se paró casi todo el partido en el lado izquierdo del ataque. Compartió terna de atacantes con el 9 (su casaca decía 7), un piel roja que perdió todo su prestigio al acusar a nuestro Andresito de golpearle la oreja (sic) y un obelisco (de número no recordado y de justificación táctica nula), que se paraba en el medio y ataba a Lautaro a la línea (el devenido seis Gómez P. siempre le ganó de arriba).
De entrada, el galardonado (en adelante, “El Barba”) no aparentaba peligro y tranquilizó a nuestra improvisada última línea, la crucial, la carne de cañón de toda infografía. Pero, con el correr del partido, el barba demostró oportunismo para tocar de espaldas y picar, o para enganchar de izquierda a derecha generando malestar en nosotros (gente de bien que extrañaba al rojo y al rojense). El Barba, insolente, la pedía siempre, ofendiendo cruelmente a sus voluntariosos marcadores. Halló su premio cuando, promediando el segundo tiempo, luego de ser trabado fuertemente por Lean, recuperó la bocha y la colocó por encima de Manotas.
Fue un buen rival cuya labor no alcanzó para frustrar la victoria inapelable de La Lima. Va desde aquí un gran saludo para él, sea cual sea la caverna, happening o plaza en la que se encuentre, ahogando en cerveza la realidad decepcionante de Sorditos, un equipo que le queda chico.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me hizo a acordar a las historias de Alejandro Apo...
Yo creo que por el perfil de sus jugadores, por ser igual de perdedores, por tener un blog parecido, deberíamos considerar a Sorditos una institución amiga.