Un positivo cambio de actitud

La Lima mostró sus aún vigentes limitaciones para afianzarse como equipo, pero esta vez lo compensó con un sensible cambio de actitud. Le faltó cambiar el resultado: volvió a caer, esta vez frente a Sordito y por 2 a 1.

Está claro que este presente del equipo verdolaga está lejos de lo que podía imaginarse tres meses atrás, cuando ganaba su primer partido del año, aquél del golazo de chilena de Seba. Ni el peor de los pronósticos hacía prever que, al cabo de nueve partidos jugados por el Torneo Apertura, iba a tener en su haber tan sólo 4 puntos. Las derrotas se han ido sucediendo hasta hacerse costumbre.

El último sábado, La Lima volvió a perder, pero la noticia es, sin duda, que no regaló el partido, ni se entregó pasivamente como en partidos pasados. El resultado final, 2 a 1 a favor de Sordito, no indica lo que sucedió en el campo de juego. Algo de esta recuperación ya se había insinuado en el partido anterior, frente a Cumparsita, cuando cayera por 2 a 0 frente a uno de los candidatos a ganar la zona. En esta oportunidad, con un equipo diezmado por lesiones y compromisos impostergables de algunos jugadores, el "verde" recuperó en parte la memoria y le jugó de igual a igual a su rival.

Repasemos las ausencias del último sábado: Lean, Lautaro, Javier S. y Ramón por lesiones; Guille, por viaje; el Cabo y Seba, por ir a la cancha. Muchos jugadores descartados para tratar de revertir la mala campaña. Como contrapartida, estuvieron presentes: Diego, en el arco; Javier G., Patico, Mauri y Pablo en la defensa (la misma del partido anterior); un volante central (Germán, nuevamente invitado), y dos volantes por las bandas (el Dibu y el Gato, amigo e invitado de Germán); como "enganche" fue Martín (en su último partido por este torneo) y arriba, Andrés y el Poten. Exactamente once , sin lugar a variantes ni suplentes que saquen fotos o filmen al equipo.

De movida, La Lima salió a coparle la parada a Sordito: mucha presión y movilidad del medio para adelante, para atacar y para cortar el juego contrario. Antes de que el equipo rival pudiera llegar al área limeña, el "verde" ya había tenido un par de situaciones claras para abrir el marcador. Primero fue Mauri, que por poco no conectó un cabezazo muy cerca de arco. Luego lo tuvo Martín, que ingresó al área de derecha a izquierda y remató débil y apenas desviado. La Lima, a partir del buentraslado de Germán y la salida por los laterales, avisaba, pero no concretaba. Sordito capeaba el temporal, y trataba de sorprender, pero con poca fluidez en el juego, ante una defensa limeña que, concentrada, anulaba cada intento.

El primer tiempo tuvo un claro dominador y fue el equipo verdolaga, que mereció irse al descanso con alguna ventaja en el marcador. En el entretiempo, la sensación era que era un partido para ganarlo, a partir del juego desarrollado hasta ese momento.

Al comenzar la segunda etapa, se hizo evidente la urgencia de Sordito: un rato antes Dynamo había empatado 2 a 2 con Côte d´Ivoire, y necesitaba ganar para quedar primero en la zona D (el puntaje de conducta lo favorece). Por eso, salió a buscar los tres puntos con todo, y el partido se hizo más parejo. Los volantes comenzaron a soltarse y el área limeña comenzó a poblarse de rivales. Así fue que a los diez minutos, un remate se desvió en el Dibu y fue a parar al córner. El tiro de esquina cayó al primer palo, donde anticiparon a Pablo. La pelota siguió cruzando el área chica, ante la duda del arquero, y por el segundo palo otro jugador remató alto a centímetros de la línea de gol. Si hubiera estado medio metro más lejos del arco, la tiraba afuera, pero fue gol. Otra vez perdía La Lima.

El equipo, que había hecho bien las cosas hasta ese momento, sintió el impacto: perdió la pelota y las marcas, y el rival empezó a cancherearle en la cara. La buena imagen mostrada se desdibujó y los ataques limeños se volvieron más esporádicos y desordenados. A La Lima se le hacía difícil generar juego y Sordito se adueñó del trámite del encuentro.

Pasados los 20´ del complemento llegaría el segundo gol de Sordito. Luego de un potentísimo disparo que reventó el travesaño y picó apenas afuera del arco, se sucedieron dos remates y dos rebotes sucesivos. Finalmente, el cuarto remate se desvió en Mauri, se elevó y se coló por encima de Diego, que se esforzó pero no llegó a sacarla.

Con el 2 a 0 puesto, parecía un partido cerrado, pero La Lima buscó el descuento, con poco fútbol y mucho huevo. Lo tuvo Germán, luego de que el Gato le bajara de cabeza una pelota en el área, pero el balón le pegó en la mano y el juez anuló la jugada.

A pocos minutos del final, luego de un centro desde la derecha sobrevino un rechazo defectuoso que tomó el Poten en la media luna del área. El veterano intentó rematar, pero le salió un pase a Andrés, que se anticipó a la salida del arquero y definió desde el punto de penal.

Prácticamente, no quedaba tiempo y la orden fue salir "a matar o morir". Todo el equipo se adelantó para tratar de lograr el empate. Casi lo logra Patico con un tiro libre que se fue muy cerca del travesaño. Y en la última jugada del partido, luego de un centro al corazón del área, el Gato anticipó al arquero y peinó la pelota, que se fue lamiendo el parante derecho. El juez pitó el final de un encuentro en el que, por la actitud mostrada por La Lima, hubiera sido más justo otro resultado.

A La Lima le está tomando todo un torneo encontrar un nivel de juego aceptable y acorde a sus pretensiones de campeonar. Esta apuesta a futuro, a pesar de la caída de varios soldados, puede llegar a dar buenos resultados, si conserva esta actitud y no olvida lo insinuado este último sábado.

El plantel que mereció ganar.