Un gol y a cobrar

La Lima fue pragmática y le ganó 1 a 0 a Caballos en el segundo amistoso del año. Un buen resultado frente a un rival de jerarquía, a muy poco de comenzar el torneo. El Goofy volvió a marcar el gol de la victoria.

Luego de un debut fallido, el sábado anterior, en el que cayera derrotado por 4 a 2 frente a Los Amigos, La Lima logró recuperarse rápidamente frente a un rival de fuste, el siempre difícil Caballos, uno de los ocho mejores del torneo pasado. Con mal de ausencias nuevamente, el verdolaga debió redoblar esfuerzos para lograr concentrar a once jugadores y afrontar un compromiso complicado por las condiciones climáticas reinantes el sábado por la tarde. Sin embargo, ni las altas temperaturas ni el elevado porcentaje de humedad impidieron que el conjunto limeño se llevara una victoria que importa, y mucho, sobre todo en lo anímico.

La ausencia del arquero Diego fue resuelta con la invitación de otro arquero Diego. Patico, Mauri y Víctor debutaron en este 2009, y Lean, Javier G., Javier S., Andrés, el Dibu, Goofy y el Poten completaron la plantilla verdiblanca.

Desde el comienzo, La Lima salió a presionar al rival, dejando de lado la cuestionable estrategia del sábado pasado de regalarle el juego y la pelota hasta estar dos goles abajo en el marcador. Caballos, que mostraba algunas variantes en su plantel, tenía su centro de gravedad futbolístico en el Oruga, el volante central, y el libreto limeño consistía, principalmente, en cerrarle los caminos al insecto.

A poco de comenzadas las acciones, Caballos tuvo una muy clara, pero el delantero definió apenas abierto al intentar cruzar el remate. La Lima, bien parada en un esquema clásico de defensa con Lean de tres y Patico de líbero, buscaba salir haciendo circular la pelota por Javier G., nuevamente el volante central verdolaga. Andrés y Dibu, por las franjas, y un disminuído Víctor como enganche, buscaban el toque que permitiera acercarse a un Poten que se tiraba atrás y un Goofy que buscaba algún espacio para llegar al gol.

Cuando se iban a cumplir 10 minutos, un pelotazo desde el fondo limeño cayó sobre la posición del Goofy, rodeado por los centrales equinos. Aún en inferioridad numérica, el corpulento centroforward disputó la pelota y se la llevó, quedando mano a mano con el arquero cuadrúpedo, a quien eludió con frialdad para definir con el arco vacío. Golazo, y ventaja parcial para La Lima.

Con el 1 a 0 en contra, Caballos empezó a desbocarse en busca del empate, pero le faltó claridad y todos los intentos fracasaban uno tras otro. Por su parte, La Lima se desdoblaba por sostener el resultado, a sabiendas de lo duras que suelen ser las réplicas de los rivales cuando el verdolaga logra ponerse en ventaja.

Curiosamente, los minutos comenzaron a correr y el empate no llegaba. Una gran tarea de la defensa, con un Javier S. sensiblemente recuperado con respecto al partido anterior, y un par de intervenciones clave por parte del arquero invitado fueron las principales razones por las que el verde se fue a vestuarios conservando la ventaja.

Para el complemento, la ausencia de variantes invitaba a regular el esfuerzo. Por si fuera poco, Víctor estaba en una pierna, y sin él La Lima perdía la chance de generar fútbol más allá de la mitad de la cancha y liquidar el pleito.

La segunda etapa mostró a Caballos mucho más decidido a buscar el empate. La Lima, replegada, esperaba en la mitad de la cancha y agrupaba jugadores, tratando de restar espacios al juego "borrico". Salvo Goofy, que se quedaba adelante, el resto arrancaba desde bien atrás, siempre respetando el esquema previo.

Caballos lo tuvo al menos en dos oportunidades, pero el arquero limeño ahogó el rebuzno de gol con dos atajadas notables, una de ellas volando espectacularmente para desviar al córner. La Lima, no prosperó en ataque, más allá de algún que otro centro que cruzó el área. Pero lo cierto es que el partido estaba más para concentrarse en evitar el empate que para buscar ampliar la diferencia.

Sobre los minutos finales, varios jugadores quedaron golpeados y extenuados por la calor, y el ritmo se hizo más lento. Tras cinco minutos eternos de adicional, el encuentro finalizó con la primera victoria limeña del año. Un resultado que no salda todas las deudas, pero que invita a entusiasmarse nuevamente .

Goofy, autor del golazo de la victoria, saluda a la parcialidá