Tras una semana relajada, en la que las afiebradas y atormentadas mentes de los jugadores limeños hallaron algo de sosiego tras el importante triunfo del sábado pasado, el verdolaga juega su última ficha en esta ronda, con la premisa de mantener el envión para los últimos seis partidos oficiales que se vienen a partir del fin de semana próximo.
Como se recordará, La Lima derrotó a Interdam por 1 a 0 hace sólo siete días, tras dos goleadas en contra consecutivas, poniendo fin a una seguidilla extensa de partidos con goles y más goles recibidos, muchos de ellos de pelotuda factura. El verde encontró una ventaja temprana y supo defenderla con uñas y dientes hasta el final, logrando tres puntos que suman y un impulso anímico muy importante para animarse a revertir el flojo presente.
Lamentablemente, los problemas a la hora de armar un esquema generoso en variantes siguen a la orden del día, merced a lesiones y compromisos varios de un porcentaje alto de jugadores santolaguneros. Evidentemente, una lista de 16 jugadores al inicio del certamen siempre resulta precozmente insuficiente, ya que tras tres o cuatro partidos debe recurrirse a jugadores invitados para llegar a 11.
Repasemos: para el partido de esta tarde confirmó el arquero y media defensa (Mauri y el Colo; ni Patico ni Javier G. estarán), y Lean y Javier S. están en duda; en el medio, el Dibu, el Poten y Víctor, más la posible presencia del Primo o Guille (lesionado); arriba, el Vaca y Andrés, confirmados.
Varios desafíos se cruzan esta tarde para el conjunto limeño. El primero, ganar para llegar a 9 puntos y mantener el promedio de este 2008, de 9 o 10 puntos por ronda (en el Apertura cosechó 9 y 10 en cada ronda). No parece algo imposible, ya que el rival sumó 5 puntos de 12 hasta el momento. Además, ganando se posicionaría mejor para la acumulación de puntos para la segunda ronda (por si el mismo equipo se queda con la zona las dos rondas).
En segundo lugar, repetir lo actuado el sábado pasado, conservando la valla invicta, sobre todo en lo referido a los "goles pelotudos", que tienen el efecto agregado de deprimir al plantel, inhabilitándolo para ensayar algún tipo de respuesta frente a la adversidad. Para esto deberá apelar a nuevos nombres, debido a las mencionadas bajas en la zaga para el compromiso de esta tarde.
En tercer lugar, mantener el puntaje de conducta, un índice que se había disparado en las primeras fechas y en los últimos partidos desaceleró su crecimiento. La baja de Seba, se dice, facilitaría las cosas para esta tarde.
Un cuarto desafío, extra, sería lograr una victoria contundente, como hace rato no tiene el verdolaga, para reafirmar la levantada del sábado pasado de cara a lo que viene y equilibrar un poco el balance futbolístico, pasado ya el codo de mitad de año e iniciado el tramo final de la temporada.
Por último, y para los amantes de lo esotérico, como quinto desafío La Lima buscará ganar en la cancha 10 del predio, cancha "mufa" si las hay (ver nota aparte). En esa cancha La Lima perdió jugando con dos más, dio vuelta un partido y se puso 4 a 3 para perderlo 5 a 4 en el final, fue ganando 2 a 0, para terminar empatando, y Pablo intentó hacer pie infructuosamente para terminar chapoteando cómicamente en el lodo, entre los innumerables fracasos que cuenta la historia limeña en ese reducto.
La cita es a las 15.45, en el Bimbo. El partido arranca a las 16.30.
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