domingo, 29 de abril de 2007

Se le escurrió entre las manos


Luego de cinco semanas, La Lima volvió a jugar y a perder, esta vez por 2 a 1 frente a Sordito. Tuvo un buen primer tiempo, en el que marcó la diferencia a su favor. Pero en la segunda etapa se lo dieron vuelta. Gran amargura en el plantel.


Como bien dice Fabi Cantilo, "nada es para siempre". Y eso es algo que, seguramente, estarán pensando una y otra vez los jugadores de La Lima, luego de la derrota de ayer, que puso fin a la histórica racha de cinco semanas sin perder. Desde aquél 24 de marzo en que cayera frente a Cumparsita por 4 a 2, La Lima no había tenido más derrotas, ni partidos. De ahora en más deberá encarar el resto del campeonato de otra manera, ya sin la presión de conservar un invicto que, ayer por la tarde, se le escapó increíblemente.

El reencuentro con el fútbol se produjo en un escenario muy diferente al de las últimas semanas: frío, mucho sol, algo de barro que dejó la inundación. La convocatoria del equipo limeño fue casi óptima, sólo faltaron Seba y Ramón, y se concretó el regreso de Martín y el Cabo, luego de varios meses de ausencia en las canchas. Quince jugadores y la posibilidad de hacer variantes en la búsqueda del mejor esquema futbolístico.

La Lima saltó a la cancha con: Diego, en el arco; Patico de líbero, Javier S. marcando la punta derecha, Lean por la izquierda y Mauri como segundo zaguero central; en el medio, por la derecha, jugó Guille, el Dibu por izquierda, Lautaro en el centro y el Primo delante de él; arriba, Andrés y Martín. En el banco de relevos quedaron Pablo, Javier G., el Cabo y el Poten.

Como suele ocurrir, ni bien iniciado el encuentro el equipo rival encontró a La Lima mal parado en defensa y casi abre el marcador, en una llegada franca en los primeros segundos del partido.

El juego lento de la Lima, debido al estado físico de la mayoría de los jugadores, se fue haciendo más incisivo con el paso de los minutos. La defensa, por momentos parecía un tanto descoordinada, pero el esfuerzo de cada uno de los jugadores fue obstaculizando los avances de Sordito. Se destacó Javier S., quien levantó su rendimiento como marcador de punta derecho (a su pesar, volvió a jugar en ese puesto) y ganó más de las que perdió cada vez que quisieron jugar por su costado.

Sordito llegó un par de veces a situaciones de gol que no supo concretar y Diego se lució en un par de tapadas clave. En ofensiva La Lima intentaba aprovechar el espacio que dejaba Sordito detrás de su última línea, ya que la defensa intentaba achicar la cancha y marcaba en línea. Fue muy importante la tarea de Dibu y Guille llevando el juego por las bandas, y de Andrés, arrancando de más atrás y buscando siempre. Los espacios para atacar estaban, y eso interpretaron Lautaro y el Primo, quienes, ademas de cortar el circuito de juego en el mediocampo intentaban poner pases precisos a las espaldas de la defensa.

Promediando el primer tiempo, iba llegar la apertura del marcador. Un córner desde la punta izquierda, ejecutado por el Primo, buscaba (otra vez) el arco. La pelota era del arquero, pero inexplicablemente se le resbaló de las manos y Guille, que estaba detrás, la empujó al gol. La Lima ganaba 1 a 0, por primera vez en el torneo.

Después del gol, La Lima fue por más y tuvo chances de aumentar. La más clara, cuando el Primo ingresó al área por derecha, enfrentó al arquero y, al no poder pasarle la pelota a Martín porque estaba en posicion adelantada, intentó definir exquisitamente por encima del arquero y su "remate" fue atajado.

Andrés y Martín también estuvieron cerca del gol en el primer tiempo, que en definitiva terminó con la ventaja mínima a favor de La Lima, un lujo que luego le resultaría muy caro.

Para la segunda parte, el equipo "verde" (ayer con camisetas naranjas) realizó tres cambios: ingresaron el Cabo, Javier G. y Pablo, por Mauri, Javier S. y Lean. Una defensa nueva, a excepción de Patico.

A poco de empezar, ya se notaban algunos desajustes en la última línea defensiva. Por otra parte, la larga inactividad de varios jugadores se sumaba al estado del campo de juego (muy pesado) y de a poco iba mermando la respuesta física del equipo.

Fue así que en uno de los primeros ataques de Sordito, un jugador recibió solo ingresando al área por derecha (Pablo pidió offside), y quiso definir por encima del arquero. La pelota pegó en el travesaño, y cuando Diego intentó capturarla fue presionado por un jugador de Sordito. El balón pegó nuevamente en el poste, Diego desde el piso tiró dos manotazos y el rival cayó. El árbitro "compró" y pitó el penal. Parecía el empate, pero el jugador de Sordito le pegó bajo y la pelota se fue rozando el poste izquierdo del arquero, que amagó a tirarse y al final no lo hizo.

El triunfo zozobraba: Lautaro con algunas molestias, cansancio en la mayoría de los jugadores, y cada vez menos llegada al área rival. Los desacoples defensivos invitaban al empate, que finalmente llegó, en la mitad del segundo tiempo. Foul en la puerta del área, apenas hacia la izquierda. La barrera, a la altura del punto del penal, ni se adelantó ni rechazó el zurdazo que se metió junto al palo izquierdo de Diego y ahora sí, 1 a 1.

Todavía quedaba tiempo para cambiar las cifras del tanteador y así lo entendieron los dos equipos. El Poten ingresó por Lautaro, y el primo quedó como único volante central. Sordito, que ganando se prendía en la pelea, fue a buscar el triunfo con todo.

En un ataque que no traía peligro, un jugador de Sordito dominó el balón entre varios jugadores de La Lima y sacó un disparo sin fuerza al palo derecho de Diego. El arquero, tapado por sus propios jugadores, se arrojó hacia ese lado pero la pelota picó y "Dos manos" la tocó pero, se le escurrió. Como, finalmente, se le escurrió el triunfo a La Lima.

Con muy poco, el equipo verdolaga fue por el gol que le diera al menos su primer punto en el torneo, pero no lo logró: apenas un remate del Poten que sacó el arquero, y un tiro libre que el Primo prefirió patear al arco.

La Lima se retiró derrotada otra vez. Es cierto, esta vez no fue por goleada, pero el árbol no debe tapar el bosque: se viene, inexorable, la hora de los replanteos en un equipo que está haciendo de la amargura todo un sello.

La Lima, ayer. Son notables las similitudes con un equipo de fútbol

2 comentarios:

Anónimo dijo...

somos una banda y unos amargos...
vamos el martes carajo

Anónimo dijo...

SOLO PARA COMENTAR QUE EL CORNER FUE PATEADO A DONDE ME LO PIDIO EL QUE METIO EL GOL (GUILLE) SALIO MAS CERRADO QUE LO QUE PENSABA, TAMBIEN QUIERO COMENTAR QUE SI MAL NO RECUERDO GRACIAS A MIS CORNER CERRADOS Y TAMBIEN ABIERTOS EN LO QUE VA DEL CAMPEONATO METIMOS 3 DE LOS 7 GOLES QUE LLEVAMOS HECHOS.